LOS VISIGODOS

Javier Etcheverry


Los visigodos son una rama de un pueblo germánico, los godos, que se estableció durante algún tiempo al oeste del río Dniéper (en las provincias danubianas del Imperio Romano), fundando después un reino en la Galia y otro en Hispania, cuando la decadencia del Imperio Romano de Occidente. 

La división en el seno de los godos se produce a principios del siglo IV, surgiendo así -por un lado- los visigodos (o godos del oeste) y los ostrogodos (o godos del este). 

El pueblo visigodo estaba más influido por la cultura romana que los demás pueblos germanos. Fue convertido al arrianismo (una versión del cristianismo considerada herética por la Iglesia romana) a través de la prédicación del obispo Ulfilas. 

Liderados por el caudillo Alarico, los visigodos inician la penetración en el Imperio Romano a través de Tracia, Grecia e Italia (donde saquearon Roma en el año 410). Esta expansión hacia el oeste se debió a la presión de los hunos. Se asientan dentro del Imperio en calidad de federados. Tras la muerte de Alarico (408), crean un reino en el sur de la Galia (con capital en Toulouse) y van estableciendo su dominio también sobre la otra vertiente de los Pirineos, en la península Ibérica, liderados por Ataulfo y en lucha contra los vándalos. 

Hacia principios del siglo VI pierden casi todos sus dominios en la Galia, al ser derrotados por los francos (otro pueblo germánico) en la batalla de Vouillé (507, reinado de Alarico II). Los visigodos se retiran hacia sus territorios hispánicos, estableciendo en Toledo (Toletum, en latín) la capital del nuevo reino. 

Se considera a Leovigildo el creador de la monarquía hispano-goda, quien luchó contras vascones, bizantinos y suevos (también germánicos) para extender la soberanía del nuevo reino sobre el conjunto de la península Ibérica. Durante su reinado se produjeron luchas civiles entre católicos y arrianos, resueltas durante el reinado de Recaredo, quien abjuró del arrianismo en el III Concilio de Toledo (589) y convirtió al catolicismo a todo su pueblo. Comienza así la romanización intensiva de los visigodos, quienes abondonan su lengua por el latín.

Tras la muerte del rey Recesvinto (671) se inicia la decadencia del reino visigodo, que cae en una virtual anarquía.  Vencidos por los musulmanes en la batalla de Guadalete (711), se desintegra el reino visigodo. Su último rey fue Rodrigo, a quien derrotó Tarik (líder de los musulmanes) en la citada batalla.

Los visigodos terminan siendo absorbidos por los hispanorromanos, de cultura y número muy superior. La influencia visigoda se hizo sentir en la faz jurídica: Código de Eurico, Fuero Juzgo. Estas prácticas se unificaron luego en la Lex Romana Visigothorum (Ley Romana de los Visigodos). Eurico era el nombre del monarca durante cuyo gobierno el poder visigodo alcanzó su máximo esplendor a ambos lados de los Pirineos.
Quedan en España valiosos testimonios de su arquitectura y orfebrería. En el ámbito topográfico, onomástico y lingüiístico en general también se hallan aportes de este pueblo. 

Artesanos - Escritores - Escultores - Fotógrafos - Pintores - Misceláneas
Copyright © 2000/2020  cayomecenas.net  - Todos los derechos reservados.