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LA PROFESORA DE PIANO DE
MICHAEL HANEKE
Marco Antonio Stucchi
Director austriaco, en su anterior película <<Funny Games>> realiza un excelente y aterrador trabajo sobre la tortura, la atadura dañina y la violencia entre dos seres. El estilo de Haneke lo hace ver como un realizador complejo. Las películas dirigidas por él son de relaciones autodestructivas en las parejas. El lenguaje cinematográfico de este director logra que el espectador se distancie del sentimiento que pueden inspirar los protagonistas en su diario que hacer cruel de uno contra el otro.
Otra singularidad es la carencia de explicación dialogada sobre la agresión de las parejas durante toda la proyección.
El espectador no escucha, pero entiende cuando la cámara extrae plasticidad a los ambientes mediante sucesión de planos. Impacta como si el encuadre explicara en silencio las características psicológicas de los personajes.
Protagonizada por Isabelle Huppert, Annie Girardot y Beniot Magimel. Esta película obtuvo distinciones en el Festival de Cannes: Selección Oficial en Competición, Gran Premio del Jurado, Premio a la Mejor Interpretación femenina y Premio a la Mejor Interpretación Masculina..
Erika Kohut (Isabelle Huppert), profesora de piano especializada en Schubert, pasa los cuarenta años, vive con su madre (Annie Girardot) mujer posesiva. Erika, tácitamente espera la muerte de ella para poder vivir libremente. La relación madre hija con el tiempo se vuelve dependiente e insoportable, las muestras de afecto no existen, prevalece el desprecio y la indiferencia. Tienen en común la desconfianza para el trato con la sociedad, poseen elementos de escape: el conservatorio para la hija y la televisión para la madre.
Dos aspectos merecen ser referidos , notados desde el inicio del film: el ambiente urbano compuesto por conjuntos neoclásicos donde se nota el paso del hombre y el tiempo; el reflejo de traumas y problemas que aquejan a la sociedad occidental actual.
Haneke observa la faceta esquizofrénica de Erika, la somete a fuertes torturas mentales que conducen a la autoflagelación. El tema de la película: insatisfacción. La pianista es rodeada de personajes incómodos que limitan su existencia. Esta contradicción la conduce a una disciplina férrea en la ejecución de Schumann (hace recordar los métodos de Gustav Mhaler, exigente hasta el desmayo).
Los espacios cerrados en blanco y negro conducen a centrar la atención de Erika practicando sus actos masoquistas como medio placentero, el rostro refleja satisfacción, sufrimiento, angustia pocas veces presentado en el cine. El registro impasible de Erika recuerda a <<Repulsión>> de Roman Polansky cuando Catherine Denueve en sus cuadros de neurosis se acercaba al desamparo infantil.
Walter Klemmer (Beniot Magimel) joven pianista, seguro y arrogante se ve perturbado al conocer la otra parte de la mujer que a él le interesa. Cuando nota que la profesora de piano renunció a sentimientos positivos decide ingresar en la vida de ella y volverla a la realidad.
Haneke al completar el cuadro con Erika Kohut y Walter Klemmer convierte el ambiente donde tienen su primer encuentro sexual en elemento vivo que aporta plasticidad al encuadre.
La pasión de profesora y alumno es desenfrenada. Para Klemmer es búsqueda, para Erika es renacer sentimientos y pasiones que había olvidado. El resultado es una lucha interna entre el sufrimiento anterior y la nueva experiencia, el rechazo cuando Erika siente nausea al no poder aceptar el afecto de su alumno.
El abandono de Erika, la confesión de Klemmer conduce a la decisión de optar por el suicidio como mejor salida a su condición.
El encuentro final entre Erika Kohut y Walter Klemmer es una excelente demostración de trabajo actoral, escenarios cámaras y pasiones. Un compendio de Pier Paolo Pasolini en <<Saló, 120 días de Sodoma y Gomorra>> o de Reinner Fassbinder en la << La ley del más fuerte>>.
El cine dejó de ser manifestación de glamour, de divismo, todavía está la violencia; el viraje actual se nota en los nuevos directores europeos en su mayoría.
<<La profesora de piano>> es muestra desconcertante de la indiferencia hacia el ser humano que predomina en la
actualidad.
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