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ALVARO MUTIS
EL CABALLERO ANDANTE DE LA PALABRA
Marco Antonio Stucchi Britto
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La frase que encabeza el artículo, es de Víctor García de la
Concha, director de la Real Academia de la Lengua cuando presentó a Alvaro Mutis en el paraninfo de la Universidad de Alcalá de Henares al ser galardonado con el Premio Cervantes de Literatura 2002.
La obra de Mutis no ha perdido el impulso primario de la imaginación como intento de abarcar la realidad desde varias
perspectivas, imposibilidad real u otras. Visiones mezcladoras, confusas,
abiertas, hondas están en sus poemas.
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Su poesía conserva los versos largos y adjetivados del surrealismo, el lector se sumerge en un mundo de vorágines, seres con perspectivas de soledad. Su prosa poética es ágil llena de imágenes. Ganador del Premio de Poesía Latinoamericana Reina Sofía, sus primeras obras fueron poesías, escribe su prosa como si fueran poemas y su poesía como un relato. Al hablar de la poesía actual opina <<La poesía no puede morir nunca; se acabará el mundo, morirá el último hombre y seguirá existiendo, la poesía es la única prueba de la existencia del hombre>>.
En algunos pasajes da la impresión que estuviéramos leyendo a Conrad describiendo los ríos africanos, con Mutis los ríos amazónicos. El personaje Maqroll es un sentimental, aventurero, algo filósofo.
Al igual que TS Elliot, Alvaro Mutis es un lector ávido y escribe mucho. Ninguno ha vivido de la literatura. Mutis vendedor de películas, funcionario de empresa petrolera, actor de radio. La función de escritor prevaleció.
Parta este laureado escritor es más difícil escribir que el pintar, que la creación musical. El pintor llena el lienzo de colores. El músico con acordes, tonos y armonías compone una pieza. El escritor parte de la idea por crear y trabaja intensamente con el lenguaje, con la gramática, con el lenguaje del tendero, del taxista, de los líos cotidianos, del entorno familiar. A todas estas variaciones el escritor tiene que ordenar, pulir y el resultado es un volumen con mensaje y estética.
El realismo mágico es la naturaleza y la vida misma. Para Mutis es una frase inventada en Europa, sobre todo en Francia todo lo originario de Sudamérica es realismo mágico, nadie lo puede definir. Lo que sucede es que el escritor sudamericano escribe su verdad, lo que ve.
<<La nieve del Almirante>> de Mutis, navega río arriba en la selva amazónica. <<El corazón de las tinieblas>> de Joseph Conrad remonta un río en el Congo. Los dos autores sienten que la selva ejerce un magnetismo sobre la conducta de quienes viven en ella a los nacidos en otras latitudes. Me viene a la memoria el caso de Furio en la Guayana venezolana, la metamorfosis lo convirtió en un orinoquense.
No todos los personajes de Mutis son hombres, hay mujeres inolvidables: Flor, Amparo, Ilona. Susana "Wita" esposa del Capitán, protagonista efímera que al morir perdura en la memoria de los lectores. Maqroll, al morir Susana exclama: <<tenía esa rara condición de transmitir la felicidad, de hacerla brotar en cada instante, así gratuitamente, sin razón alguna, porque si, porque venía con ella, con sus gestos, con su risa, por los atardeceres en el trópico.... cuando perdemos a alguien así, sabemos que una ración más de la escasa dicha que nos es concedida se ha ido para siempre>>
Alvaro Mutis ganador del Premio Neustadt, del Cervantes, del Príncipe de Asturias, del Roger Callois y condecorado con la Legión de Honor en Francia, escribe con un rigor implacable y con la angustia para lograr plenitud y claridad de lo que ha deseado decir mediante la palabra.
San Isidro, 20. Agosto. 2005
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