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EL CUERPO ES LA MEJOR PALABRA
Antonio Marín Segovia
El cuerpo es la mejor palabra, la mejor obra de arte que podemos ofrecer, regalar, olvidar. No nos hace falta nada más que nuestro propio cuerpo para saber que el agua de todos los mares y oceános es el primer y exclusivo alimento de nuestra sangre, de nuestros amaneceres.
Y para poder estar lleno de alegrías sanas, debemos atrevernos a cultivar nuestras risa, caminando dentro de los sueños que nacen y crecen en nuestro propio ser, en nuestras miradas, en nuestra boca, en nuestras manos, en nuestro sexo, en nuestros silencios, en nuestros pies...
Saber y reconocer sin miedo que somos una única expresión perfecta y necesaria, absolutamente perfecta y rotunda es el primer paso para poder apreciar y amar todo lo que es cuerpo y carne sin esquinas... Sí, somos un accidente hermoso y siempre podemos ser capaces de captar y confundirnos con nuestro entorno y con todos los seres que amamos y respetamos...
No hay secretos ni dolor para el que se sabe arena y fuego en una noche de invierno, en un despertar de nieve.
Ahora mismo es algo tan vital y urgente saber que nuestra respiración, que nuestras miradas y nuestras manos entrelazadas son ese árbol frondoso, ese camino despejado, ese sendero tranquilo, que carece de laberintos y espejos que ha nacido dentro de nuestra casa, en medio de nuestra lecho...
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