MENSAJEROS
OSCUROS
Fernando Musso
Ayer tocaban a mi puerta
eran los hombres sin rostro
ayer merodeaban mi puerta
eran los perros de los hombres sin rostro
ayer tocaron a mi puerta
eran los rastros de la muerte, de los hombres, de los perros,
de los días de la espera.
Los atendió mi fe de erratas
mientras allá en un patio lejano
sońábamos jugar a los hombres sin rostro.
I
Fernando Musso
Preguntaron por mí hoy en la tarde
me acobardo saber que me buscaban
una mujer con cuerpo de animal delato mi guarida.
|